Buscar la manera de ahorrar gasolina, es una de las causas que más preocupa a la hora de realizar nuestros desplazamientos en coche. Mejorar nuestra conducción nos ayudará a ahorrar unos euros a final de mes, a pesar de que los vehículos consumen cada vez menos gracias a los avances en tecnología y la irrupción de los sistemas de hibridación.
Los coches diésel actuales ofrecen medias de consumo impensables hace unos años, y lo mismo sucede con los vehículos propulsados por gasolina.
A pesar de todo, es importante reducir el consumo de gasolina o diésel a través de una conducción eficiente que contribuya a la mejora del medio ambiente, y de nuestro bolsillo.
Aplicando una serie de trucos, aunque parezcan evidentes, podemos alcanzar cifras de consumo incluso inferiores a las marcadas por las marcas.
El aire acondicionado es uno de los sistemas no esenciales para el funcionamiento del vehículo que más energía consume. Lo ideal sería poner la temperatura del aire sobre 5º C menos que la temperatura exterior. Recordamos que el aire acondicionado es efectivo pasados unos minutos, por lo que no es necesario llevarlo a tope.
Para valorar el consumo de gasolina entre el aire acondicionado y llevar las ventanillas abiertas, tendremos en cuenta dos aspectos:
En resumen, para ahorrar algo de dinero en nuestros viajes; en ciudad es recomendable viajar con las ventanillas bajadas, por el contrario, en autopista o a altas velocidades se recomienda viajar con el aire acondicionado conectado y las ventanillas cerradas.
Un coche que se mantiene en buen estado es siempre un coche que consume menos combustible. Si mantenemos nuestro coche limpio, con el mantenimiento al día (filtro de aire limpio, filtros de aceite, cambios de aceite al día…) y sin avería, ahorraremos siempre combustible.